lunes, 4 de marzo de 2019

lágrimas negras

Si me soltaras las manos de la garganta,
por un segundo;
si dejases de apretar con todas tus fuerzas
y me soltases;
si no estuviese suspendida en el aire,
colgada de mi propio cuello
por tu ego;
si cayese al suelo por fin, 
y tocase el mármol con mis manos,
aunque me hiciera daño
o me saliesen moratones del golpe,
sólo si me dejases sentir otro dolor distinto
al tuyo,
sólo por un segundo 

-ese segundo
en el que aflojas tus manos
de mi asfixie,
dejas caer mi cuerpo 
y sólo en ese lapso, 
reaccionaras-
te juro,
que te daría tiempo a llorar 
hasta en  color negro
mientras te das cuenta
de que tu intento
en matar a mis monstruos, 
te ha convertido en el peor de ellos.

Y ahora no te reconoces,
y nadie podrá devolverte a tu inocencia
porque todos te tienen miedo y,
yo,
que puedo ver en tu interior 
la alegría de un niño sin malicia,
me estoy ahogando.

Y no vas a salvarme. 

2 comentarios:

  1. Voy leyendo tus poemas, Marina, ( los publicados en tu blog) y pienso, que te has asomado con crecido asombro e insondable ternura (desde ese Papá ¡hace ya cinco años ¡ hasta este donde te estoy hablando) al misterio de lo difícilmente comunicable; ámbito en el que persistes e intentas “mostrar” en tus poemas. Difícil empeño, Marina, difícil ,pero se dice que ese es el misterio y el don del “poeta” que algo serio y sincero tiene y quiere decir. A mí, Marina, lo que voy leyendo con atención, mucha atención, me produce un luminoso vértigo (no sé si es la palabra justa) en el que me voy, seducido, demorando.
    Cuida, Marina, qué esa brasa que te hace decir lo que dices, no te queme. ¿Publicar? Bueno, está bien, pero como tú dice, lo importante cuando se siente y quieres es vivir escribiendo, y no otra cosa haces en este tu blog ¿no?
    Lo prometido en la barra del Café.
    Carlos

    ResponderEliminar
  2. Ha sido un auténtico placer leer una opinión tan contundente de este pequeño y, humilde, blog. Espero seguir cautivando al lector de esta manera, todas las veces que pueda.
    ¡Mil gracias !

    ResponderEliminar